martes, 16 de enero de 2018

El APRENDIZAJE SE DA VIVENCIÁNDOLO...

El día a día en la escuela es un aprendizaje continuo para todas las personas que están vinculadas a ella.


Durante este curso escolar estamos realizando un Seminario que versa sobre "elaboración de material manipulativo que favorezca la atención a la diversidad". Este título tan largo se sustenta en la necesidad de aprender haciendo, tocando, vivenciando. Se trata de que los niños y niñas sean los artífices de su aprendizaje.

La neuroeducación nos lanza mensajes certeros continuamente. Francisco Mora nos dice que "solo se aprende lo que se ama".


María Montessori afirmaba que "las manos son el instrumento de la inteligencia".


Las escuelas de la Reggio Emilia titulan uno de sus manuales con esta sugerente afirmación: "La inteligencia se construye usándola".


Todo esto nos hace reflexionar...

Hemos trabajado sobre las propuestas del método TEACCH (Treatment and education of autistic related communication handicapped children), una propuesta inicialmente pensada para personas con TEA, pero perfectamente aplicable a toda la población. Existen materiales e ideas muy interesantes para poder realizar, de forma manipulativa, actividades de asociación, identificación, conceptualización...haciéndolo de forma visual y motivadora. El método TEACCH va mucho más allá de los materiales, pero hoy nos centramos en este aspecto. Si quieres profundizar sobre este método, puedes hacerlo Aquí

En Diciembre tuvimos la oportunidad de hincarle el diente a la pedagogía Montessori a través de otra ponencia en el marco de nuestro Seminario. Pudimos entrar en contacto con la importancia de plantear propuestas en las que se aísla la dificultad y se facilita la atención en la tarea que estamos realizando. Si nos enfrentamos a un juguete que tiene letras, formas, colores, ruedas, texturas...Es muy difícil que podamos centrarnos en un aspecto, más bien nos "descontrolamos" y aunque parezca lo contrario, en lugar de motivarnos, nos cansamos y dejamos el juguete a un lado. Nos hemos sobreestimulado...Esto daría para otro post...

Otra idea fundamental y muy interesante es la introducción de la autocorrección. En los materiales Montessori podemos saber si hemos realizado la tarea correctamente sin necesidad de recibir una corrección externa. Podemos guiarnos de forma autónoma. Esto es genial si queremos plantear propuestas en las que se priorice el aprendizaje sin error, tan importante cuando trabajamos con alumnado con TEA, ya que evitamos que se fijen aprendizajes "erróneos". El aprendizaje por ensayo y error, en estos casos, no es lo más conveniente ya que puedo aprender, por ejemplo, que la palabra "huevo" se escribe sin "h" y después me va a costar más deshacer esta conquista para sustituirla por la ortografía correcta.

Aquí tenemos un ejemplo de un material autocorrectivo (dos opciones para una imagen, elegimos la palabra que consideramos correcta, por detrás, a partir de un apoyo visual podemos saber si lo hemos hecho correctamente):

Imagen en el centro y posibilidades de escritura a los lados


Autoorrección

Ante todo esto nos surgió la pregunta de cómo llevar el material manipulativo a cursos más avanzados de Primaria. Cómo hacer tangible aquellos contenidos que requieren un nivel mayor de abstracción. Hoy, en una nueva ponencia, hemos reflexionado sobre esto. Hemos conocido propuestas y nos llevamos ideas.
Nos vamos a la cama con ilusión y muchas ideas. No podemos dejar de soñar...